En la línea de salida, los mismo de ayer: Cesar, Pedro, Francisco, Simón y Paco.
Optamos por retrasar la salida vespertina hasta las seis menos cuarto para impedir que el fuerte calor reinante junto al viento nos pasen factura muy pronto.
En esta salida, seguimos la propuesta de Pedro García: Costear toda la línea de mar desde Terreros- impresionantes vistas en el acantilado de Los Cocedores con el mar picado y los bañistas intentando surfear- hasta el paseo marítmo de Águilas para posteriormente, playa de las Delicias, Centro Comercial Águilas Plaza y a la altura del desvío de Calabardina -frente a las nuevas instalaciones de Decatlhon-, girar a izquierda para realizar una ruta que "a priori" nos debía gustar sobre todo por la variedad de su recorrido.
La verdad es que Pedro tenía razón: rambleamos en varias ocasiones, sendeamos en otras tantas, tuvimos que subir algún que otro repecho que al menos a mí - y a otros, prefiero ser discreto- me costó echar pie a tierra, contemplamos alguna que otra perspectiva impresionante con la marina de Cope y cabo Cope como elementos de fondo.
Él recorrido por el interior de Águilas -era mi primer recorrido y desconozco los nombres de estas ramblas y lugares, excepto el del barranco de Los Canos, lugar en el que dejamos la tierra para tomar el asfalto del camino que nos dejaría en la carretera de El Garrobico- nos resultó muy atractivo y algo exigente de piernas.
Más adelante, giro a la izquierda y por un camino nos plantamos en la playa de Calabardina y acto seguido iniciamos el "sendeado" que nos llevaría hasta la urbanización situada frente a Los Geráneos y desde aquí a la rotonda de entrada a Águilas que la atravesamos en un tris, ayudados por el viento de cola.
Como la tarde había avanzado más de lo esperado - o tal vez habiamos andado menos de lo previsto- y las luces del día deseaban ocultarse, optamos por poner "directa" a Terreros y pies para que os quiero. ¡Mariquita el último!
Francisco Pérez provocó una estampida que pudieron seguir Pedro y César. A mí me tocó quedarme en tierra de nadie en tanto que Simón, algo tocado en estos últimos días, cerraba el grupo.
Al final, algo más de 48 kms. y medio en un tiempo de 2 horas y 51 minutos, rozando prácticamente los 17 kms. de media.Toda una paliza de la que hoy, miércoles, intentaremos reponernos en el merendero Padilla de Lorca junto a cuantos "bikers" del CDC Pulpí deseen asistir, tal y como ya venimos haciendo en los últimos años.
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