Primero fue Sierra Cabrera; la pasada semana, Sierra Almenara -bueno, una zona muy concreta de este amplio espacio natural lorquino; este domingo, Sierra Almagro.
Con un pequeño retraso con relación a la hora prevista, doce intrépidos ciclistas conformamos el grupo pulpileño -Alfonso Jiménez, Diego José Navarro, Mª José Haro, Juan Cáceres, Bárbara Navarro, Francisco Toledo, Juan Terrones, Pedro García, los jóvenes Iván Gómez, Juan David Molina, Raúl Ávila y este narrador- que se disponen a compartir ruta junto a otros bikers de Cuevas.
Llegados al punto de reunión acordado en la base del cerro Cucharón -el punto más alto de toda la Sierra con algo más de 700 metros de altitud- nos encontramos con el veterano Juan Sánchez -ha subido desde El Saltador atendiendo a la invitación que le hicimos ayer-, Joaquín Vidal y Miguel Soler "Míchel" -él nos ha diseñado esta ruta desconocida para todos excepto para Juan Sánchez.
Iniciamos la bajada hacia Huércal Overa por el camino forestal encementado y al llegar al cruce de La Rellana nos dirigimos hacia el fondo del valle.
¡Que alguien ponga remedio a la enorme masa forestal de la zona devastada por la procesionaria! ¡Nos quedamos sin pinos! Según Juan Sánchez, los pinos parecen esparragueras
Ahora, desde el fondo del valle nos toca ascender hasta el collado del cortijo del Grajo.
Descubrimos un entorno natural poblado de pinos en el que los trinos de diversas especies nos sorprenden gratamente. Tanto como el impresionante panorama que se abre a nuestros pies con el campo huercalense tapizado fundamentalmente de plantaciones de cítricos.
Extasiados ante tanta belleza, descubrimos el majestuoso vuelo de un águila sobre nuestras cabezas.
Desde aquí hasta El Saltador el pronunciado descenso, por un maltrecho camino de piedra y tierra, nos aconseja prestar la máxima cautela.
Tras el nuevo agrupamiento, el grupo se fracciona en dos. Unos, el más numeroso, opta por regresar a Pulpí; el otro, decide proseguir la ruta que conducirá de nuevo, a través del camino forestal encementado, a la cumbre de la Sierra de Almagro.
Llegados a la cantera de alabastro, Michel y Joaquín ponen rumbo hacia Cuevas en tanto que Terrones, Diego, Mª Jose y yo lo hacemos en dirección a los repetidores de TV para desde allí iniciar el descenso por la rambla de Mahoma hasta Pulpí.
Al final hemos acumulado algo más de 60 kms. con 1250 metros de subida acumulada en un tiempo de 3 horas y 49 minutos.
La verdad es que ha sido una jornada bastante dura, -sobre todo con el batacazo, sin apenas consecuencias -unos ligeros arañazos en la pierna- que me he dado en la bajada de enlace entre El Saltador y el camino de cemento de subida a la sierra- menos mal que las condiciones meteorológicas nos han acompañado.
3 comentarios:
Saludos a todos;
Paco espero que la caida no sea nada serio. Veo que haceis bonitas y largas rutas.
Recibi tu mail, pero ha sido imposible para mi salir, hemos estado el 75% del nucleo familiar con una ligera gastroenteritis. De no ser por esta contrariedad, tambien hubiera acudido yo a la quesada.
En otro orden de cosas, te dire que el jueves mientras algunos se marchaban a mi tierra a esquiar, yo me hice la famosa ruta Transcabrera. Ya te informare para hacerla.
Buenas rutas.
Paco, es cierto esto va tomando cuerpo. La quedada de ayer, estuvo, a la altura de las espectativas, de nuevo excepcional, en un marco de categoria, y que cada vez nos abre una nueva puerta.
Por cierto, te ha llegado mi correo.
Saludos.
Es cierto. A ver si poco a poco somos capaces de juntarnos más de una veintena.
Ahora la cosa se complica para salir los domingos porque hay muchas marchas programadas, pero siempre habrá alguno que otro libre.
Será cosa de afinar agendas y calendarios.
Un saludo
Publicar un comentario