Coronamos Sierra Cabrera

Domingo, 22 de febrero. Jornada memorable. Hay que levantarse temprano porque hay que desplazarse hasta Turre. Allí, junto a restaurante Adelina nos espera Joaquín y Juan con los que hemos quedado para "asaltar" la cima de Sierra Cabrera, el pico Mezquita con algo más de 960 metros de altura. En esta ocasión, el ascenso lo realizamos por Cortijo Grande y La Carrasca por una carretera asfaltada en todo el trayecto.

Los primeros kms. de la subida se hacen llevaderos hasta que llegamos a La Carrasca,pero a partir de este singular paraje el recorrido se endurece y hace más complicada la ascensión. Aparecen las primeras rampas complicadas.

Para coronar Sierra Cabrera tenemos que subir el último km. por un camino de tierra y piedra maltrecho por las lluvias. En algún tramo no queda más remedio que echar cuerpo a tierra.

Y al final, después de 1 hora y 41 minutos nos plantamos en la cima. El espectáculo que se divisa, a pesar de la niebla y las malas condiciones de visibilidad, es inconmensurable.

Naturaleza en plena eclosión de color y aromas, vías de comunicación que se divisan en los serpenteantes valles.

Tiempo para las fotos y los vídeos. Alguno de ellos grabado ex profeso y dedicado a Pablo, un buen amigo de Joaquín.

El descenso vertiginoso por El Dondo a través de una carretera muy estrecha y a veces "maltrecha" nos lleva hasta la urbanización de Cortijo Cabrera. ¡Qué rampones! La subida desde Turre a través de Cortijo Cabrera se muestra más que difícil. Habrá que intentarla en otra ocasión.

Gracias, Joaquín. Gracias, Juan. Habéis conseguido que conozca y disfrute de un paraje de singular belleza abierto a futuras e inminentes escapadas.

Se acabó "el puesto"

Después de más de un mes de "exilio" de la zona de las veredas de Grima en el que hemos respetado escrupulosamente a los cazadores y a sus "puestos" desde el alba hasta bien entrada la tarde, la "veda" por estos parajes ya ha concluido y este sábado, 21, nos hemos reencontrado con las veredas.
José Gallardo, Jesús Ayala, Alfonso Jiménez y este narrador hemos echado dos horas escasas por estos parajes, incluida la cañada de Grima, en ambos sentidos.
Ha sido una jornada ciclista muy corta -unos 33 kms. en total-, pero había que estar en Pulpí para las 11.30 horas porque Jesús Ayala quería continuar haciendo bici, pero esta vez junto a los triatletas -hombres y mujeres- de la selección española que estos días se encuentran en Pulpí realizando un "stage" de pretemporada.
Y para el resto de expedicionarios nos bastaba con esta distancia, máxime teniendo en consideración que mañana domingo nos espera la subida a Sierra Cabrera junto a unos "bikers" amigos de Cuevas de Almanzora.
Pero, mañana será otro día.

Los Mojinos, un paraje natural impresionante

Llegó el domingo después de tres salidas seguidas -Jueves, 40 kms. con subida a la sierra de Enmedio por la vertiente de Las Norias, y Viernes - 62 kms. con subida hasta Santa Mª de Nieva a través de Úrcal, siempre junto a Iván Gómez y ayer sábado, día de San Valentín, 51 kms. junto a Alfonso Jiménez y Jesús Ayala por una ruta que, Jesús Ayala, "con esta y otra, serán dos" las veces que ha pasado por estos lugares.

La verdad es que la ruta no presentaba ninguna novedad para los que "ruteamos" por la zona del camino de Grima a Terreros, con variante de bajada por la rambla de Pozo Esparto hasta llegar a Terreros para desde aquí dirigirnos a Cañada Blanca y los Arejos para subir finalmente por Puerto Carril.

Pero lo grandioso, sin lugar a dudas, ha tenido lugar hoy domingo.

Alfonso Jiménez y yo, puntuales a la cita de las 9.30, nos plantamos en la Glorieta. Nadie acude y ponemos rumbo a Cuevas de Almanzora. Optamos por un recorrido por carretera -hay que llegar a Cuevas cuanto antes para subir hasta la Sierra de Almagro.

Cruzamos Cuevas y nos dirijimos hacia Cupillas -antes parada para foto y en ese momento aparece Joaquín Vidal, ciclista de Cuevas que también lleva nuestra dirección. Ya somos tres en ruta.

Dura ascensión hasta llegar a la zona de la cantera de alabastro.

Joaquín nos propone bajar hasta Los Mojinos. Un lugar totalmente desconocido para nosotros. Nos lo pensamos y como es temprano aceptamos su propuesta.

Bendita elección. Algo más de 5 Kms. de sinuosa bajada hasta encontrarnos literalmente "sobre el pantano del Almanzora".

Vegetación frondosa, naturaleza en estado salvaje, una paz infinita.

Allí, asombrados por el paisaje, tiempo para el "condumio" antes de emprender la subida. Rampas muy duras, superiores a las existentes en la ascensión desde Huércal-Overa.

Comienza a caernos una finísima lluvia que apenas nos moja.

Finalmente llegamos a la base de los repetidores de TV y optamos por tomar la bajada por la rambla de Vizcaíno hacia Pulpí.

En un momento determinado, alto en el lecho de la rambla para foto. Unos almendros en flor nos cautivan y nos inmortalizamos junto a ellos.

Al final, 65 Kms. que habrá que volver a repetir con la grupeta. Merece la pena.

Palizón, pájara en Sierra de Almagro y adiós jamón

Sábado, 7. !Vaya jornada¡ Fieles a la cita sabatina. A las nueve y media nos concentramos en la Glorieta. Esta vez hay muchas novedades en el grupo. Benito hace acto de presencia y junto a él Francisco Losilla y José "Recorte" -de vacaciones- además de Diego y Mª José
El viento sigue dando la lata, pero no nos arredra. Partimos dirección a Huércal-Overa. Rambla de Vizcaíno, camino de El Saltador y rambla del Saltador hasta llegar a la base de acceso por el camino encementado hasta los repetidores de TV. Primeras fotos de la jornada-al menos eso pensaba yo porque, cosa curiosa, tan sólo las últimas se han conservado en la tarjeta de memoria. Supongo que a Diego no le habrá ocurrido lo mismo en su cámara.
Nada más comenzar, primer contratiempo. La cadena se posiciona entre el casete y los radios. No me queda más remedio que quitar la rueda para solventar el problema. Los demás siguen su ascensión.
Algo está sucediendo en mi organismo. No subo como suelo hacerlo. Me siento agotado. Mi cabeza parece un hervidero. Creo que estoy al borde de una pájara. Mª José ha bajado en mi búsqueda y con ella llego a la zona habitual de avituallamiento donde se encuentra el resto del grupo. Las vituallas habituales y seguimos ascendiendo. No camino. Una parada del grupo antes de llegar a la base de los repetidores para darme tiempo de reagrupamiento.
Tomamos el camino forestal del cortijo Soto y bajada hasta los Guiraos y desde allí hasta El Largo- antes, bajo el puente de la autopista de Vera a Cartagena, Benito ha roto el tubular y hay que colocar cámara de repuesto.

Caminode Grima y desde aquí hacia la Fuente. Al final me he recuperado algo.
No obstante, lo mejor d ela jornada estaba por llegar. Degustación de jamones: los obtenidos como premios al club en las marchas de Puerto Lumbreras -casi un año después- y Sin miedo al brujo.
Estábamos convocados -en la página del club y de boca en boca-, pero sólo estuvimos muy pocos: José Antonio Sáez -el anfitrión-, David López, Juan Vicente Pascual, Francisco Jiménez, Diego J. Navarro, Mª José Haro, José Mª Soler, Antonio Fernández y este narrador dicharachero.
Una velada regada con cerveza y abundante "condumio".
Creo que me he recuperado, aunque para curarme en salud, mañana domingo, haga viento o no, me quedo en casa. Lo tengo clarísimo.
Creo que tengo preparadas labores agrícolas.

Solo contra las inclemencias

Viernes, 6, el viento sigue soplando. Iván y Juan David había quedado en salir conmigo. A la hora de salir, ninguno de ellos aparece.
Decido salir solo. Aunque inicialmente queríamos subir hasta Santa Mª de Nieva, la verdad es que sería de locos volver e enfrentarse al viento un día más. Opto por subir por la rambla de Vizcaíno y a la altura del km. 12 tomo el camino que se abre a la izquierda y que enlaza con la bajada desde el cortijo Soto.
Desde aquí, bajada hasta Los Guiraos para seguir el trazado de la I Marcha MTB Villa de Pulpí hasta llegar a Grima y tomar el camino rural que conduce hasta La Fuente.
Opto por seguir la variante izquieda de la autopista Vera-Cartagena y subir al Mirador y desde aquí dirigirme a Pulpí pasando por el camino del barrio El Mortero y el de la Estación de Ferrocarril.
¡Qué coñazo de viento! Al final han sido sido 40 kms. los recorridos en un tiempo de 2 horas y media. Otra media de pena: 15.8 kms/h.

Jueves, asalto al cortijo Soto desde la vertiente de Los Guiraos

Creo que ya estoy recuperado del palizón de Sierra Nevada y junto a Iván Gómez me dispongo a subir a Sierra de Almagro. De entrada, la ruta habitual buscando el camino que nos conducirá hasta Los Guiraos.
Una vez allí tomamos el camino ascendente de algo más de 7 kms., interminable en algunos tramos, que nos llevará hasta el conocido cortijo del Soto -lugar donde se ubicó el alto de la montaña y el primer avituallamiento de la I Marcha MTB Villa de Pulpí.
La media, de pena: 13.6 kms., pero el viento de poniente nos ha machacado en todo el recorrido.
A partir de aquí, bajadas vertiginosas - a pesar de las zonas cortadas por cadena y barreras- con velocidad máxima de 64.8 kms- hasta llegar al Rincón de El Saltador. Parada para coger un par de naranjas.
Posteriormente tomamos el camino rural que enlaza El Saltador con Pulpí a través de la rambla de Vizcaíno.
Decidimos tomar la variante que surje a la izquierda y que nos conduce hasta la carretera de Huércal-Overa a Pulpí. La cruzamos-después de degustar las naranjas- y tomamos rumbo al camino de servicio del canal del Trasvase.
A la altura de la toma de agua del embalse de Galasa tomamos el camino de Benzal y desde aquí directos a Pulpí.
Al final, el viento de poniente se alía con nosotros y nuestra media mejora: 18.3 kms.
Hemos hecho algo más de 45 kms. en un tiempo inferior a las 2 horas y media.

Me recupero, pero no confío en mis rodillas

Sábado. Mano de santo. El diclofenaco, ibuprofeno y el masaje de arnica me han dejado como nuevo.

Bueno, casi nuevo. Los cruzados debieron sufrir mucho en Sierra Nevada y no quiero castigar mis rodillas por lo que opto por seguir tratándome y quedarme en casa. Aún así, tengo la sensación de que aún cojeo algo.

Domingo. Las previsiones meteorológicas anuncian lluvia. En estas condiciones prefiero quedarme en casa, descansando.

Las previsiones se cumplieron y el grupo de Alfonso Jiménez -muy atrevidos ellos- volvió hecho una sopa.

El fin de semana próximo habrá más oportunidades.