Hace apenas dos semanas nos propusimos crestear por Sierra Almagrera y, de no haber mediado la propuesta de subida a Campo López, se habría hecho ese mismo fin de semana.
Hoy, al fin, nos hemos aventurado en esta dura ascensión en la que hemos contado con una climatología extraordinaria.
No sé que hubiera pasado si en el tramo que hemos tenido que ascender a pie monte arriba, sorteando rocas y atochas, nos hubiera calentado el sol.
Afortundamente, la brisa marina que ascendía desde el mar junto a una mañana completamente nublada, ha facilitado el recorrido.
En la partida, a las 8 de la mañana, sólo Alfonso Jiménez está presente si bien Diego Navarro y Fco. Pérez se unen sobre la marcha.
De entrada se pone rumbo hacia las veredas de Grima para desde aquí, a través de la variante de Castillaricos -hacía tanto tiempo que no pasaba por esta variante que había olvidado el rampón previo a coronar-, emprender la ascensión definitiva que se nos abre a mano izquierda nada más comenzar la bajada por carretera hacia Los Lobos. El tramo de ascensión final se inicia en la bifurcación de caminos que hay frente a la casa cueva "Feliz Navidad".
Tomamos el camino que se abre a nuestra izquierda y poco a poco, serpenteando el barranco, vamos cobrando altura.
El camino, abierto por los cazadores, no plantea grandes problemas de ciclabilidad excepto en una zona de repecho donde se alcanza el 22% de desnivel: el resto del camino se suaviza con rampas máximas del 17%.
Al llegar al collado, ante nuestros ojos, se abre un panorama extraordinario: la costa en toda su extensión, desde Calabardina a Carboneras.
Y del collado a la cima del cabezo, unos 100 metros de desnivel que hay que cubrir a pie con la bici al hombro o como cada uno se las ha compuesto.
Alcanzada la cima, nos incorporamos a una vereda rompepiernas abierta por los "moteros" y que crestea esta zona de Sierra Almagrera hasta fundirse con el camino que desciende paulatinamnete a Cala Panizo.
Después del palizón que nos hemos dado para alcanzar la cima y de los tramos rompepiernas en subida en que nos hemos visto obligados a caminar, hoy no teníamos muchas ganas de bajar hasta la playa y hemos tomado las de Villadiego: a la rambla de Pozo Esparto y de ahí rambla arriba hasta alcanzar en el chalet de La Cumbre el camino de vuelta hacia Grima donde nos abandona Paco Pérez y nosotros tomamos el camino de enlace con La Fuente. Al final, pocos kms., no han llegado a los 37, pero me han dejado el cuerpo para olvidarme de la bici en una temporada... de 24 horas.
Mañana domingo, como siempre, a las 8 de la mañana, otra nueva ruta. La que se determine.
