sábado, 30 de julio de 2011

Una vez y no más

El hombre debe ser el único animal que tropieza muchas veces en la misma piedra porque de no ser así ¿cómo se explica el calvario del pasado sábado?
¡Esto es un pared y lo demás...rampas
Recuerdo que en cierta ocasión, aunque no tengo muy claro con quién compartí la aventura de descubrir la variante a la que el pasado sábado, en torno a las 11 y algo de la mañana con un sol que comenzaba a deslomarnos, "invité" a afrontarla a mis compañeros de fatigas.
¡Estos ya no salen conmigo ni con receta médica! Una vez y no más se dijo alguno que otro. Ahora me doy cuenta de mi osadía.
La cuesta imposible en el lecho del río
La verdad es que mi intención, visto el estado anímico y físico de algún componente del grupo, era aliviar al máximo los sufrimientos evitando la mayor parte del recorrido del camino de servicio del pantano de Cuevas después de haber coronado el Cucharón, realizado la senda de la variante de Huércal la Vieja, abordado la variante de bajada al pantano de Cuevas de Almanzora y enfrentado a las dos "cuestecillas" del lecho del río.
Tramo inicial de la pared: cerca de 200 metros de desnivel
Pensaba que continuar río abajo supondría menor desgaste físico. Craso error. Exhaustos logramos alcanzar el camino de servicio después de haber trepado, acarreado, tirado, soportado y demás "-ados" la cuesta de marras con pendiente que ni el gps logró registrar.

Menos mal que a partir de aquí, el regreso hacia Pulpí es mucho más llevadero aunque previamente tuvimos que coronar la Era Alta y tomar la variante de Burgallana a Jucainí para hacer un "pit stop" en El Jarrao.
El Jarrao, peet stop obligado
Agua fresca, coca cola y alguna vitualla que otra que aún quedaba reservada en la camella. 
José Luis en la rambla de los Mahomas
Y todo esto sucedió por querer ampliar el horizonte paisajístico de José Luis Silvente que se encuentra disfrutando de sus vacaciones veraniegas y desconoce las rutas de la Sierra de Almagro.
En plan "guía betetero" le invité a conocer este paraje tan diverso e iniciamos nuestro recorrido, si bien a la altura del bazar chino nos encontramos a Diego Jiménez "Precisas", Alfonso Muñoz "Farruco" y Antonio Cervantes "Calero" -que debutaba en la plaza con picadores- que han quedado con Antonio José "Choche" Mtez. y Paco  Teruel "Publindal".
Conocedor del habitual comportamiento de los debutantes, invité a José Luis a proseguir nuestra ruta prevista.
Y así pusimos rumbo al Centro Hípico para subir al Cucharón a través de la rambla de los Mahomas.
En menos de hora y media, invirtiendo menos tiempo que por el recorrido alternativo de El Rincón de El Saltador, nos presentamos en el Collado y, lógicamente, tratándose de José Luis hubiera sido imperdonable "perdonar" la  ascensión hasta la cima desde donde en días claros se divisa en todo su inmensidad la costa desde Águilas a Mojácar así como el interior de la comarca con la Sierra de los Filabres como telón de fondo resaltando sobre ella la Tetica de Bacares.
Desafortunadamente el sábado las condiciones meteorológicas impedían tal disfrute.
Y estando a punto de retormar el descenso nos llevamos la gran sorpresa de la jornada al ver aparecer al cuarteto de bikers pulpileño comandado por Diego Jiménez que habían optado por decirle "hasta luego Lucas" a Antonio Cervantes quien con muy buen criterio había decidido darse la vuelta.

Ante esta nueva situación y como quiera que ninguno de ellos conocía los entresijos de la Sierra de Almagro les propuse continuar "la integral".
Senda de Huércal la Vieja
Aceptan de buen grado y comenzamos el descenso hacia la variante de Huércal la Vieja al pantano del Almanzora, si bien antes, acometimos la senda del cerro de Huércal la Vieja.
La verdad es que ha sido la primera vez que la he hecho subido en la bici casi en su totalidad y los "noveles" me han copiado la estrategia.
Collado de la divisoria de Huércal al pantano
Llegados al collado de la divisoria de la variante de Huércal la Vieja nos encontramos con Diego Rguez. Vidal -que no Tomás, ni Tomasín, ni Tomarás-, un biker cuevano que se une en la bajada a nuestro grupo y que posteriormente, ya casi en el lecho del río, optó por afrontar la vuelta a Cuevas por el camino de servicio de la margen derecha del río. Sabia decisión. El mismo que, de haber sabido las complicaciones a las que nos tendríamos que enfrentar posteriormente, deberíamos haber cogido nosotros también y nos habríamos evitado el palizón de la "pared" final.
Por eso, una vez y no más. No vuelvo a afrontar la variante del lecho del río ni con prescripción médica.

La nota agradable apareció al atravesar El Largo inmerso en el bullicio de la celebración de sus fiestas patronales.
A nivel anecdótico, reseñar los problemas mecánicos  del sistema de frenado de la bici de Paco Teruel "Publindal"  y los problemas musculares sobrevenidos a Alfonso Muñoz en el tramo final del recorrido que le obligó en algún momento a poner pie en tierra.
¿Y de distancia? Ni más ni menos que 70 kms. Otro maratón sabatino más.
Detalles del recorrido: Rambla Los Mahomas-El Cucharón-Vte Huercal Vieja-Pantano Cuevas- Vte Los Picotes-Vte EDAR

miércoles, 27 de julio de 2011

De una "panzá" murió un burro

Y nunca mejor dicho. El palizón del pasado sábado me ha pasado factura hasta el punto que no me he acordado de la bici casi en una semana.
Lo que comenzó como un paseo-aventura en solitario -nadie se personó a la hora acordada en el punto habitual- orientada al descubrimiento de las variantes mineras de Jaravía y de Cañada Blanca concluyó como una auténtica maratón: por encima de los 81 kms. recorridos, más de 1400 metros acumulados, más de 5 horas de pedaleo y más allá de las 3300 calorías perdidas.
Si esto no es una maratón que alguien me lo aclare.
En honor a la verdad hay que referir que las benévolas condiciones meteorológicas reinantes con abundantes nubes -incluso nos chispeó en el tramo comprendido entre "La Meca", perdón "La Isla" y el desvío de Calabardina hacia el Garrobillo-, una brisa marinera que nos ventilaba adecuadamente y tímida persencia de sol en el momento más inoportuno del recorrido en plena subida de la cuesta del Capitán contribuyeron sobremanera a que la epopeya acabara dentro de los límites aceptables.
De salida, en solitario, me planto en la rotonda de Jaravía, la de acceso a Mundo Aguilón, y giro a la izquierda para tomar la variante - a partir de ahora así la llamaré- de la mina de Rodrigo en honor al fotógrafo que en su día la diera a conocer- en dirección a la cañada de Los Pérez, la de la EDAR de Terreros-Jaravía.
El recorrido no entraña ningún problema, excepción hecha de una zona virada y en bajada donde en caso de caída puedes mandar SMS al Sr. Lobatón para que te localicen sepultado bajo un manto de tierra y polvo, y en un santiamén enmarcado entre campos de sandías putrefactas -otro palo más a la economía agrícola- te deja en el camino de la EDAR.
El siguiente reto consiste en encontar un atajo desde la cañada de las higueras -aquella que otrora lucía unos impolutos carteles ortográficamente impresentables invitando a dejar los higos en paz- con el camino de Cañada Blanca.
Me abro paso como puedo entre el saladar, los carramoños y la infinidad de inesquivables arbustos existentes hasta alcanzar mi objetivo.
No le recomiendo a nadie que se convierta en explorador sobre todo porque 300 metros más abajo se localiza la auténtica entrada del camino a Cañada Blanca. ¡Una autopista libre de peaje dérmico!
El siguiente reto, descubrir el recorrido de la variante de la mina de mercurio del denominado valle del Azogue.
Con toda la ilusión del mundo me dirijo a Cañada Blanca y nada más bajar la cuesta próxima a la variante de Terreros, giro a la izquierda en el primer camino que se abre y bordea uno de los cabezos de la zona minera.
Y he aquí la sorpresa de la jornada: el trayecto es circular y viene a dejarme en el mismo lugar donde inicié el reto del atajo a Cañada Blanca.
De regreso al punto de partida, opto por cambiar el rumbo y me dirijo hacia Terreros toda vez que son las 8 de la mañana y es posible encontrarme con algún biker con ganas de pedalear.
Y allí estaba Antonio Pérez, el "fragüero". Nos ponemos de acuerdo y sin saberlo comenzamos a fraguar la jornada "maratoniana".
De salida, transitamos por la explanada del acantilado de  Honduras con la isal Negra a nuestros pies y sendeamos por los riscos que longitudinalmente conducen hasta exótica playa de las Palmeras.
Hacía mucho tiempo que no había pasado por estos vericuetos y la verdad es que a pesar de que los senderistas transitan por aquí hay zonas ciertamente peligrosas.
Ni que decir tiene que por aquí sólo se puede circular a patita en la mayor parte del recorrido fundamentalmente porque al menor desiquilibrio uno puede despeñarse por el acantilado existente.
Vamos, que mejor abstenerse con bicicletas.
¿Por qué no se adecúa este sendero como lo han hecho en la zona de Los Cocedores?
Aprovechamos nuestro tránsito para dejar constancia fotográfica tanto de la belleza y capricho de la naturaleza como de la peligrosidad de la senda.
El recorrido hasta Águilas prosigue por la ruta "marisquera" y posteriormente, atravesando la ciudad y contemplando la zona portuaria y playera -¡impresionante el Palacio de Exposiciones y Congresos!-, nos dirigimos hacia la cuesta de Gos donde con cierto retraso está previsto el avituallamiento.
A la altura de La Isla nos sorprende un imprevisto chispeo que contribuye a avivar nuestro ritmo.
Camino de El Garrobillo nos unimos a un "carretero" lorquino veraneante en Águilas que previamente, en un alarde de lucimiento nos había sobrepasado.
Nos sirve de guía de una serie de rutas que se abren en esta zona: la Pinilla, las minas de azufre de Gos... y al llegar a la ermita decide abandonarnos y retornar hacia Águilas.
Ni que decir tiene que damos cuenta de las vituallas -hoy no hacemos fotos a Paco Rabal - y comenzamos la ascensión hacia Los Mayorales.
Pedaela que te pedalea, sin dar mayor importancia  las distancias, coronamos Los Mayorales y nos deleitamos con el panorama que la niebla y las nubes  nos ofrecen cubriendo las cumbres y el valle.
¡Qué pena que mi cámara -ya está que no vale ni para peso- no haya captado esta extraña sensación más propia del invierno!
No hay tiempo que perder. Hemos sobrepasado los 50 kms. de recorrido y hay que estar de vuelya en casa antes de que el sol haga acto de aparición.
Optamos por bajar hacia Águilas a través del camino que nos conduce a través de las cañadas hasta el Polígono Industrial para desde aquí, por la variante de "los palets" -así la ha bautizado Antonio Pérez- dirigirnos al Cocón camino de Jaravía donde habíamos establecido el punto de "hasta luego Lucas": uno, para subir por Gorreta -es mi caso-; otro, para regresar a Terreros por Jaravía.
Al final, Antonio opta por hacer algún km. más y decide subir la cuesta del Capitán.
Me lo pienso, tomo conciencia del cansancio acumulado en las piernas -más de 70 kms.- y me olvido al instante de Gorreta y junto a Antonio me enfrento al Capitán: ¡casi 14 minutos y lo más significativo aquello parecía el Alpe D´Huez pulpileño!
Y lo efectos directos y hasta los colaterales del palizón no iban a tardar mucho en aparecer.
Después de almorzar en Terreros no había manera de mover las rodillas: me suena a tendinitis de grado sumo porque no puedo dar un paso. Mejor tumbado a la bartola y ejercitádome con la Nintendo DS
Por la noche, de regreso a casa, tratadas las rodillas con el correspondiente gel antiinflamatorio y viendo la escasa evolución posiotiva, aviso a Abderrazak para que no cuenten conmigo el domingo.
Y el domingo, ni te cuento: idem, eaedem, idem. O sea, lo mismo. Descanso playero, garrones en el rompeolas, hamaca, dame pan y no me digas tonto y nintendo.
Y así han ido pasando los días hasta hoy que parece ser que ya "sí siento las rodillas"
 

domingo, 17 de julio de 2011

Jornada completísima

La jornada matinal de hoy domingo ha resultado de lo más completa toda vez que hemos tenido la oportunidad de rodar a muy buen ritmo -casi al límite de mis posibilidades-, ascender al collado de El Cucharón -la fatiga acumulada ayer no aconsejaba volver a machacarse - y descender a tumba abierta tanto por la vertiente cuevana de la Sierra de Almagro como el tramo final de la jornada, la cuesta del Capitán.
A las 7:15 horas junto a Antonio Oller y Abderazak estábamos dispuestos a emprender esta nueva aventura betetera que en su mayor parte se ha desarrollado en el entorno de la Sierra de Almagro con entrada por El Rincón de El Saltador y salida por El Alhanchete.
El primer tramo de Pulpí al collado de El Cucharón se ha realizado a un ritmo muy bueno hasta el punto que el cronómetro marcaba poco más de 1 hora y 25 minutos.
Al llegar a este punto nos hemos encontrado con un biker de Cúllar que acababa de coronar El Cucharón, Ginés -así ha dicho que se llamaba-, que está aprovechando sus vacaciones en Garrucha para conocer la zona.

Se ha unido a nuestra bajada y después de atravesar Campos hemos buscado la margen derecha del río para mostrarle el camino a seguir para enlazar con la carretera de Palomares.
 Esta incidencia nos ha llevado a cambiar nuestros planes de vuelta.

En lugar de hacerlo por la Era Alta y la variante de los Tres Cabezos lo hemos hecho atravesando La Portilla y Arnilla donde nos hemos detenido un momento en la casa de mi madre.
Desde Arnilla nos hemos dirigido hacia la carretera de Cuevas a Los Lobos por la que hemos continuado hasta el paraje de Los Picotes donde hemos tomado la variante del Camino Real que nos conduce hasta El Largo.

Una llamada a Antonio resulta determinante en el desenlace de la jornada.
Son las 10 de la mañana y Antonio había avisado de que a esa hora estaría de vuelta en casa. No nos queda más remedio que acelerar el ritmo para no dilatar mucho la espera.
A la altura de El Largo, frente a la casa de Juan Blas Soler, Antonio se detiene para responder al teléfono en tanto que nosotros continuamos por el camino de la variante de El Largo a la EDAR de La Fuente.
A tenor de lo visto posteriormente, Antonio reemprende la marcha y lo hace por carretera -Abderrazak dice que lo ha visto en la lejanía.
Esta incidencia vuelve a avivar nuestro ritmo porque queremos coincidir con Antonio en la rotonda de La Fuente aunque no ha sido posible: Antonio ha debido sacarnos mucha ventaja.
¿Por qué ha optado por volver por carretera si a él este tipo de superficie no le va?
A la altura del cruce de semáforos abandono a Abderrazak y pongo rumbo hacia Terreros porque allí es donde hoy tengo la meta instalada por dos motivos: echar un ojo a la disputa de la liga de clubes de triatlón y el más importante, el reparador "papeo" de la jornada después de haber disfrutado de un merecido baño -el primero que me doy en la playa este año- y de haber tomado un poco el sol para "igualar" los tonos de la piel.

Al final, un recorrido completísmo de 67.5 Kms. realizados en un tiempo de 3:29:06 y con un consumo de 2226 calorías.
Ni que decir tiene que el retorno de Terreros a Pulpí no lo he hecho en bici, sino en coche. ¡A ver quién ha sido el guapo de montarse esta tarde en bici o de salir a la calle!

sábado, 16 de julio de 2011

Con la precisión de los relojes suizos

Así da gusto. Las previsiones se han cumplido con la misma precisión de un reloj suizo.
Se trataba de compaginar tanto la jornada betetera matinal del sábado con la propuesta de la Junta de Andalucía "Ciudades por la bici".
Sabíamos que disponíamos de casi tres horas de pedaleo antes de aparecer en el entorno del mercado municipal de Terreros y con ese objetivo hemos partido a las 7:15 horas en dirección a Pozo Higuera.
Nuestra intención era bajar por Puerto Carril a la Venta San Felipe para enlazar con Águilas a tráves del collado de Los Mayorales, pero en el momento de llegar a Pozo Higuera hemos decidido cambiar el itinerario para abordar junto a  Alfonso "metros" y su cuñado Agustín -ya respuesto del batacazo de hace dos semanas en el Apartadero- la subida a las Cruceticas y desde allí bajar hasta la Venta San Felipe.
En plena subida por la rambla Nogalte, a las 8.00, a la altura de la Escarihuela, una llamada telefónica rompe la monotonía del pedaleo en el que Abderrazak, Alfonso Jiménez, Gabriel Cervantes así como Alfonso "metros" y Agustín nos encontrábamos atareados. 
Se trata de Sebastián Pérez que debido a su prolongada inactividad betetera desconocía el adelanto de hora vigente desde finales de junio y se interesa por saber qué nos pasa que no aparecemos en el lugar habitual.
Le explico la situación y le invito a que salga a nuestro encuentro a través de Puerto Carril.
Así, cada uno por la ruta elegida, nos presentamos en la Venta San Felipe y decidimos modificar el trazado inicial: bajaremos hacia Terreros por la variante de la cuesta de las Palomas.
Y como tal se ha realizado si bien hemos utilizado las variantes de El Cocón y de Cañada Blanca para cumplir con el objetivo horario.
Y a las 10.00 de la mañana nos hemos presentado en la zona habilitada para las actividades programadas de "Ciudades por la bici".
Hemos dado cuenta de las vituallas, nos hemos refrescado, hemos "plantado" lechugas -tal vez para hacer patria- en el "tiesto" que nos han ofrecido y de allí hacia el recinto habilitado para la disputa de la Liga Nacional de Clubes de triatlón.
Hemos tenido el privilegio de encontrarnos con Pedro García y César Serrabona, dos de los componentes del equipo que lucirá la representación pulpileña en este evento deportivo.
Les deseamos todas las fuerzas y suerte del mundo y nos adentramos en el corazón del intrincado espacio competitivo salvando algún que otro obstáculo alfombrístico.
Y desde allí, atravesando el saladar de las salinas ponemos rumbo hacia Jaravía, aunque previamente hemos tenido que sortear los obstáculos que la empresa urbanizadora de estos terrenos nos ha interpuesto en el camino.
Preparando los refrescos para la tarde triatlonera
Llegados a la rotonda de inicio de la subida hacia Jaravía el personal opta por ponerle ritmo y se produce la gran diáspora de la jornada.
Unos en plena subida del Capitán -¡no hacía calor esta mañana en el tramo final!, otros iniciando la cuesta y otros más allá del Botas.
No sé para qué tanta demostración de poderío si al final no nos queda otra opción que bajar a la búsqueda de los rezagados o bien esperar arriba en el collado verificando la enorme capacidad de captación de aire que poseen los pulmones como ha sido en mi caso después del palizón que me he dado para subir la cuestecica en 9:30 minutos y llevando las rpm cardíacas hasta un máximo de 182.
Y mañana domingo, más. Eso sí, salida a las 7:15 horas. Ruta indeterminada.

Recorrido: Cruceticas-Vte Las Palomas-Terreros-Cta Capitán

viernes, 15 de julio de 2011

Menudo fin de semana bicicletero

 Este fin de semana, San Juan de los Terreros se viste de gala para acoger una nueva edición del Triatlón Villa de Pulpí con la disputa de la liga nacional de clubes.
Y como antesala de la fiesta del triatlón, los más modestos nos sumamos a la fiesta "Ciudades por la bici", una actividad de menor entidad que patrocina la Junta de Andalucía conjuntamente con el Ayuntamiento de Pulpí y en la que vamos a colaborar el CDC Pulpí, CDC Bicilocura y CDAD Galián.  
No obstante, esta iniciativa, no implica cambio alguno con relación a la salida matinal de cada sábado si bien la ruta se organizará de modo que todos los bikers que salgamos mañana sábado -a las 7:15 horas- estemos en el recinto del mercado municipal de Terreros a las 10.00 para sumarnos y participar en las actividades organizadas.
¡Coged las bicis y "pa" Terreros!

lunes, 11 de julio de 2011

Día de descubrimientos de nuevos territorios bteteros

¡Qué cosas nos depara el azar!
Esta mañana, junto a Pedro Jesús Martínez, he salido en plan "paparazzi" minero.
Nuestro objetivo era documentar gráficamente una serie de minas y sus correspondientes construcciones anejas ubicadas en Terreros, Jaravía y la cañada del Capitán con vistas a las próximas conferencias que la Asociación Cultural  "La Legua" organizará este próximo mes de agosto  y que se celebrarán una vez más en el recinto del castillo de Terreros. 
Y entre tanto trajín de subir y bajar cabezos, de otear los horizontes, como por arte de birlibirloque aparecen ante el objetivo de mi cámaras tres nuevas rutas beteteras.
La primera de ellas en el entorno de Cañada Blanca, en pleno "Valle del azogue" con dos variantes muy bien definidas: atravesando el valle o bien bordeándolo.
La segunda ruta promete convertirse en una variante muy transitable toda vez que enlaza la rotonda de Jaravía con la rambla de Los Pérez -la de la EDAR de Terreros.
Y la tercera de ellas, con al menos tres variantes, se encuentra en plena Cañada del Capitán, tomando como referencia la denominada "Curva del zurdo".
Otra cosa es descubrir si estas variantes tienen o no continuidad por las faldas de la sierra del Aguilón en dirección a la cuesta del Capitán o hacia El Apartadero.
Ni que decir tiene que a partir de hoy estas rutas pasan a formar parte de mis próximos objetivos.
Así pues, bendita mañana. Mejor imposible: hemos realizado el reportaje fotográfico que pretendíamos y de paso descubrimos nuevas rutas.

Tiempo al tiempo que todo se "bicicleteará".

domingo, 10 de julio de 2011

I Quedada Incansables Bike: más de un centenar de participantes

De enorme éxito se puede calificar la I Quedada organizada por el CDC Incansables Bike de la localidad nijareña de San Isidro realizada con motivo de sus fiestas patronales.

Y al éxito de la Quedada han contribuido los más de 100 bikers- las féminas también se han unido a la propuesta- llegados desde diferentes puntos de la geografía almeriense si bien la representación nijareña con presencia de sus dos clubes se ha llevado la palma.

El itinerario seleccionado también ha facilitado el éxito de la jornada porque sin entrañar grandes dificultades -se han realizado hasta 5 reagrupamientos- ha recorrido una parte muy representativa del Parque Natural de Cabo Gata-Níjar.

Y si faltaba algo, el colofón se ha puesto con un extraordinario refrigerio final servido en el Centro Cultural en el que la cerveza, los refrescos y el jamón han propiciado la "recarga" de las energías consumidas.
Pasadas las 8:30 horas, escoltados por un vehículo de la Policía Local, se daba la salida con un recorrido urbano antes de poner rumbo hacia la zona minera de Rodalquilar punto más distante desde el que se iniciaría el retorno.
En el tramo de ida me ha encantado la visión tanto del valle volcánico de acceso a Rodalquilar como la senda que lo recorre en toda su extensión poblada de palmitos y adelfas.

Al llegar al poblado minero, la organización nos ha sorpendido con agua "fresquita" con la que hemos repuesto las maltrechas "camellas" a la vez que hemos aprovechado el momento para dar cuenta de nuestras vituallas.

Tras el descanso, ya de regreso, con un calor en el límite de lo insorportable, hemos podido descubrir la ruta de las ruinas de las minas donde en otros tiempos se extraía el oro nijareño así como las diferentes propuestas de rutas de "cine" alternativas existentes.

Ni que decir tiene que aquí hay rutas por doquier, alternativas donde poder "perderse" gustosamente por estos parajes agrestes.
¿La representación pulpileña?
A última hora, por cuestiones diversas, Alfonso Jiménez, Abderrazak Moujib y Juan Gabriel Cervantes no se han desplazado dejándonos a Iván Gómez, a Antonio Oller y a mí como pulpileños desplazados a San Isidro, si bien, desde Almería también se nos unió Juan Pascual Oller.


sábado, 9 de julio de 2011

Sin ganas de "na"

Hay días en los que lo mejor sería quedarse metido en la cama antes de levantarse para coger los archeles y poner rumbo a cualquier destino.
Y hoy ha sido uno de esos días. No he dormido más de 3 horas y a las 6:40 el reloj ya me estaba dando la lata.
¿Me levanto? ¿Me quedo en cama?
No puedo seguir encamado porque cuando uno queda con alguien debe cumplir con su palabra.
Así pues, a las 7:15 horas, tal y como había quedado con Alfonso Jiménez y con su cuñado José González -mañana se queda sin saldo vacacional- puestos en marcha.
¿Ruta?
A ser posible muy "ligth". Propongo ir a Desert Spring -ni Alfonso ni José han estado allí en MTB- y ellos aceptan sin ningún problema.
Tomamos la variante de la EDAR de La Fuente a El Largo para desde aquí dirigirnos hacia Cuevas del Almanzora.
A la altura del cruce de los semáforos nos cruzamos con un numeroso grupo de "carreteros" pulpileños que giran en dirección a Terreros y Vicente "Sleck" Suna nos informa que un grupo de Mteberos se dirigen hacia la Sierra Enmedio.
A nosotros lo de la sierra como si no lo hubíeramos oído. Lo tenemos claro. Nada de rampas ni rampones.
Pasada la EDAR descubro que no he puesto en marcha el GPS -hoy no me cuadrarán las cuentas-. Me enfado conmigo mismo, le doy al "arre" y comienza a funcionar.
En plena cañada de Tegefín, entre el naranjal, nos topamos literalmente con un grupo de Vanderrutas capitaneados por Andrés "Afis" Cuevas que se dirigen hacia las veredas de la Capellanía de Grima para bajar finalmente hasta Pozo Esparto y retornar posteriormente a Cuevas.
Fotos de rigor de este encuentro imprevisto y cada mochuelo a su olivo.
Al llegar a La Portilla tomamos dirección a Arnilla con objeto de pasar por la casa de mi madre, pero debía ser muy temprano porque aparentemente no había rastro de que ya estuviera trajinando por la casa.
Optamos por no deternernos -menuda faena si nuestra insistencia la hubiera despertado para que tan sólo nos hubiera visto pasar- y seguimos en dirección a Las Cunas.
Nada más atravesar el lecho del río y tomar el camino de la margen derecha, a José, haciendo cabriolas con su "burra", se le ha interpuesto una botella de Cruzcampo que algún desaprensivo, después de metérsela entre pecho y espalda, la ha dejado abandonada y le ha provocado un corte en la cubierta delantera.
Después de varios intentos infructuosos de "taponamiento" del tubeless hemso tenido que poner cámara para seguir adelante.
La verdad es que el corte no habría entrañado ningún problema para el tubeless, pero, como siempre ocurre, olvidamos que hay que recargar el "moco" de vez en cuando.
Hoy el neumático, a tenor de su estado, ni siquiera se había resfriado y sin resfriados en casi imposible presumir de "mocos".
Así pues, operación cambio de cámara y en marcha hacia Desert Spring.
Por lo visto, hoy estaba muy animado este complejo de golf. Después de transitar por la urbanización, antes de encaminarnos hacia Las Herrerías, en la misma puerta de entrada -se está convirtiendo en habitual- hemos dado cuenta de las vituallas de la jornada.
Nuestra mayor preocupación estaba en regresar a Pulpí antes de que el sol nos calentara y alguiee nos ha ayudado toda vez que  desde Grima hasta Pulpí nos ha acompañado una reparadora brisa  además de que el sol se ha ocultado tras unas nubes que han aparecido por arte de birlibirloque y que incluso nos han dejado alguna que otra gota testimonial.
Nuestra sorpresa ha llegado posteriormente cuando a la altura de Casa Tejá hemos comenzado a percibir el característico olor a tierra húmeda.
Conforme avanzábamos hacia La Fuente y El Barrio El Mortero hemos tenido ocasión de descubrir el intrigante misterio: ha debido de llover "recio".
Nosotros hemos vivido ajenos a esta circunstancia.
Y ahora a velar armas de cara a la jornada de mañana en San Isidro con motivo de la Quedada que organiza el CDC Incansables Bike a partir de las 8:30 horas con motivo de las fiestas patronales y que nos permitirá conocer una parte considerable del Parque Natural Cabo de Gata-Níjar.
La salida desde Pulpí será a las 7.00 horas

martes, 5 de julio de 2011

I Quedada Fiestas de San Isidro de Níjar

Tal y como se anunció en su momento, este próximo domingo tenemos una nueva propuesta de quedada.
En esta ocasión el escenario será el del entorno natural del Parque Cabo Gata-Níjar y está organizada por el CDC Incansables Bikes de la localidad nijarena de San Isidro.
 
Está previsto que la salida se realice desde la plaza de la iglesia a las 8:30 -creo que el sol nos va a dar el día.
De acuerdo con la información facilitada por Pepe López, el recorrido no entraña ninguna dificultad y al término de la quedada se ofrecerá un degustación de "jalufo" patrocinada por el "jalufero" oficial de la quedada.
Para organizar el desplazamiento se hace necesario saber quién acudirá y cómo piensa ir.
Teniendo en cuenta la distancia -casi 90 kms.- la salida desde Pulpí hacia Níjar se hará a las 7.00 siendo la autopista la opción más rápida.
Así pues, espero vuestros comentarios.

domingo, 3 de julio de 2011

Fiesta y madrugueo: actividades casi incompatibles

A tenor del comportamiento matinal cada vez tengo más claro que fiesta y madrugueo son casi incompatibles máxime si la noche precedente uno se ha dedicado a ingerir "zumo" de cebada San Miguel y acompañarlo de vituallas tan poco recomendables como calamares en salsa americana y a la romana, orejas de cerdo en salsa o algún que otro montadito de salchicha.
Si a todo esto -bien condimentado y aderezado con su justo picante- le añadimos el palizón matinal sabatino y las escasas 4 horas de sueño de las que he podido disfrutar no es de extrañar que uno sienta ciertas sensaciones raras en las piernas imposibles de eliminar.
Y eso es lo que ha pasado. En primer lugar, no he sentido el despertador ¿lo pondría bien anoche?; en segundo lugar, he tenido que salir pitando para estar dispuesto a las 7:15 horas y, en tercer lugar, los condicionantes de recorrido y tiempo disponible.
En esta situación José Gónzalez y yo hemos salido en dirección a Terreros con intención de retornar por Grima, pero, igual que sucediera el pasado domingo, otra vez en el bazar chino nos topamos con otra patulea de bikers.

En esta ocasión mucho más numerosa, tanto que me ha sido imposible recabar en el número si bien se ha contado con la presencia de algún que otro biker que en otras ocasiones han salido con nosotros tal ha sido el caso de Agustín, de Alfonso o de Mariano -no recuerdo cuánto tiempo hace que compartieron con nosotros Campo López - e incluso alguna nueva incorporación como ha sido el caso de Juan Antonio.
Inicialmente nuestros planes y los suyos coincidían y nos unimos al grupo que pone rumbo al Mirador.

En la bajada, el primer contratiempo de la jornada: la rueda delantera de la bici de Agustín destalona y se da un tortazo espectacular aunque afortundamente sin consecuencias físicas si bien le impide proseguir junto a nosotros.

Aventurándonos a encontrarnos con algún que otro escopetero, optamos por adentrarnos en las sendas del Cerro de los Pinos.

Afortunadamente, la zona está limpia de cazadores y nuestro trásito se hace sin ningún incidente si exceptuamos alguna que otra "bajada" involuntaria de la bici.
De aquí a Grima y a las sendas de la Capellanía, lugar donde sin quererlo se provoca la fragmentación del grupo: unos, los más adelantados, toman la variante de la izquierda; otros, los más conservadores, optamos por la variante del alto de Castillaricos donde Juan Terrrones nos vuelve a demostrar que los rampones, con técnica y un par de ..., se pueden subir sin problemas.

Problemas de comunicación por falta de cobertura telefónica o por haber dejado los móviles encima de los pianos junto a la necesidad de estar en Pulpí antes de las 10 me obligan a poner tierra de por medio y en plena bajada de Castillaricos hacia El Catalán localizo al resto del grupo en la zona del "puente de las colmenas".
José González y Abderrazak formamos un trío y ponemos rumbo hacia Pulpí buscando el camino más corto y este no es otro que el que conduce desde Mediplant a Mundo Aguilón.
A partir de este tramo comienzo a no sentir las piernas, a tener problemas hasta para mover los desarrollos.
¡Cosas del destino! Ayer subía la cuesta del Capitán a plato y hoy me las he visto y deseado para seguir en la distancia a José y Abderrazak en todo el recorrido.
Coronada la cuesta del Capitán, se acabaron los problemas y lo más positivo: estábamos de regreso con muy poco retraso con relación a la hora prevista.


sábado, 2 de julio de 2011

Retorno a la Sierra de los Mayorales y cambio de horario veraniego

Hacía mucho tiempo que no transitábamos por este paraje aguileño tanto que casi no lo recuerdo y tal vez por ese motivo hoy me apetecía retornar a Los Mayorales.
En la línea de salida José González -de vacaciones por unos días-, Alfonso Jiménez, Gabi Cervantes y Antonio Martínez no ponen reparo alguno a mi propuesta y, después de 5 minutos de cortesía por aquello de que algún rezagado pudiera incorporarse, hemos puesto rumbo hacia La Hoya para bajar por puerto Carril hacia La Venta San Felipe.
De entrada, antes de incorporarnos a la carretera de Puerto Carril, hemos sido sorprendidos por una serie de disparos.
Hemos tenido ocasión de detectar su origen: los cazadores han vuelto a tomar el campo acompañados de sus correspondientes jaurías.
El tránsito por los caminos y veredas comienza a ponerse complicado para los "mountain bikeros".
Llegados a la cuesta de la Cabra la escena vuelve a repetirse con nuevos tiros y escopeteros pateándose los cabezos.
Hoy la ascensión hasta el collado de Los Mayorales nos la hemos tomado con mucha, tal vez demasiada filosofía, excepto José y Gabi que decidieron poner pies en polvorosa nada más pisar la susodicha cuesta.
Se han dado una paliza para nada porque después, una vez coronado el collado, se han encontrado con un trío de bikers que subían desde Calabardina y se han puesto a paliquear con ellos hasta que finalmente hemos llegado los "desestresaos".
Foto de rigor, algún que otro cambio de aguas y descenso hasta la ermita de la Cuesta de Gos, lugar donde habitualmente solemos hacer el avituallamiento y hoy no iba a ser menos.
Desde aquí hasta El Garrobillo ni una pedalada, unas cuantas más hasta Águilas.
¡Menudo mercado semanal celebran junto a la circunvalación! Se nota que ya hay gente disfrutando de vacaciones.
El retorno a Pulpí, por la variante de Agrucapers a El Cocón -¡qué hermosura de mangos!- y desde aquí a Jaravía para asaltar otra vez la cuesta del Capitán.
Hoy mi propuesta era subirla a plato y no hacerlo por encima de las 170 rpm.
En lo primero no ha habido problema, pero lo de las rpm ha sido otro cantar.
Inicialmente todo supercontrolado hasta alcanzar la zona que muy pronto se irá al garete si nadie ataja el desprendimiento que ha comenzado a fragaurse en la carretera.
Desde aquí hasta coronar me ha importado un bledo la respuesta del corazón y lo he llevado hasta las 180- o al menos eso me ha parecido ver a mí.
Ni que decir tiene que esos 300 últimos metros me han sacado de mis casillas.
¡La bici está hecha para sufrir! No sé porqué me quejo.
¿Y mañana domingo?
Se acabaron las tonterías. El titi, es decir, yo, a las 7:15 horas -sí, sí, a las siete y cuarto de la mañana- estaré en el lugar habitual. Si hay alguien, bien; si no, pues manta y a bicicletear de modo que a las 10.00 de la mañana, sin que apenas me caliente el sol, esté de vuelta en casa.
Así pues, quién quiera acompañarme que esté dispuesto a las 7:15 en el cuartelillo de la Policía Local.