sábado, 30 de octubre de 2010

De ruinas en ruinas por Almagrera

Mientras que la última jornada dominical la aprovechábamos para subir de "romería bikera" al paraje huercalense de La Fuensanta -algo más de 60 kms. de recorrido y 3:17 horas de continuo pedaleo-, este fin de semana se ha comenzado con cierta relajación muscular.
Unos, con la excusa de que por la tarde tenían una nueva cita con la bicicleta; otros, con el reto de la Transalmagro de mañana domingo.
El hecho es que la ruta sabatina ha sido muy "light": cháchara y más cháchara, paradas, visitas imprevistas al túnel minero de El Arteal, al plano inclinado de la cala de las Conchas y alguna que otra variante que ha ido surgiendo sobre la marcha. Vamos, en pocas palabras, de ruinas.
En la línea de salida Abderrazak, Alfonso Jiménez, Antonio Pérez "fragüero", Antonio Martínez "cerve", Vicente "suna" junto a José y Toni Parra. 
Hemos echado en falta a Fco. Toledo, pero el plan Renove le ha jugado una mala pasada ¡se ha quedado sin bicicleta, a pesar de disponer de dos monturas, y hasta dentro de un tiempo no dispondrá de su nueva Scalpel tope gama!
De salida, a la altura del cruce de semáforos, sufro un contratiempo: se abre una vía de salida de aire en el tubeless que no cesa de darme el tostón hasta llegados a la rotonda del Centro de Transporte.
De aquí en adelante, sin novedad y así nos hemos plantado en Los Lobos desde donde hemos girado en dirección al camping Yerbabuena para acceder a la rambla y poner rumbo a Villaricos.
A la altura del poblado minero de El Arteal, parada y propuesta de visita al abandonado túnel minero.
Pasamos entre el "despoblado" y ruinoso vestigio minero y ascendemos hasta el antiguo lavadero para posteriormente adentrarnos unos metros en el túnel y descubrir su interior.
Fotos de rigor a la salida, frente a la entrada de la galería, y en marcha hacia Villaricos.
 
De camino nos sorprende el bonito espectáculo de ver  una manada de patos cuchara -según Cerve- disfrutando del agua que discurre rambla abajo.
Igualmente quedo sorprendido de las obras de canalización que están realizándose en el tramo final de esta  rambla hasta su confluencia con el río Almanzora así como del espectáculo y hedor de las aguas residuales que la EDAR de Villaricos vierte en este tramo final de la rambla.
Al llegar a Villaricos nos dirigimos hacia el puerto deportivo y paseo marítimo.
Hacemos el alto reglamentario de avituallamiento y  a su término ponemos rumbo hacia Terreros.
A la altura del cuartel de Blanquizares abandonamos la carretera y tomamos los caminos y sendas de tierra que se van abriendo a nuestra derecha a la par que contemplamos las escombreras y las ruinas de la actividad minera.
Después de haber bajado hasta el nivel del mar  para contemplar los vestigios de una montaña "empedrada" por la que se descargaba mineral en otra época, retomamos de nuevo la ruta por carretera hasta llegar a la cala de las Conchas, zona con importantes restos mineros incluido el impresionante plano inclinado.
Tras la obligada visita al paraje del plano  inclinado, fotos incluidas, comenzamos a replantearnos en camino de retorno.
No llegaremos a Terreros ni subiremos por la cuesta del Capitán como estaba previsto. En su lugar  nos decantamos por hacer las variantes que nos conduzcan sucesivamente hasta el cerro El Oficio.
Así, a la altura de El Calón, por camino de tierra giramos a  la izquierda buscando la rambla de Pozo Esparto y su conexión con la carretera hacia Castillaricos para abordar la variante que nos suba al paraje de la Cumbre.
Un despiste de  Antonio Pérez determina que el grupo se fraccione: unos, ascienden por la cañada que culmina en  el chalet del "inglés"; otros -Antonio, Toni y yo-, lo hacemos por la variante de las veredas.
Al final, todos nos volvemos a encontrar a los pies del cerro El Oficio -lugar emblemático de la cultura argárica- y desde aquí, entre plantaciones de habas ponemos rumbo definitivo hacia La Fuente.
Si el GPS no engaña y hay que confiar la precisión y fiabilidad de este instrumento, nos hemos metido entre pecho y espalda un total de 54.5 kms. en un tiempo de pedaleo de 3:27 horas.

Ruta del sábado: Pulpí-Villlaricos-Pulpí

Y mañana domingo pondremos broche -cada cual que le aplique el metal que le apetezca- a octubre con la quedada conjunta Transalmagro en la que pulpileños, guazamareños y cuevanos volveremos a pedalear juntos.
La salida desde Pulpí-atención al cambio de horario- a las 8:00 y desde Guazamara a las 8:30 horas.
Y aquí no acaba la cosa: Nueva cita para el lunes, día festivo: a las 9:00 inicio del asalto a Campo López desde la vertiente aguileña..

1 comentario:

Anónimo dijo...

hola Paco,soy toledo, pero vaya pasada con mi montura nueva, hasta las navidades no podre disponer de ella, pero bueno nos conformaremos con la montura de carretera,menos da una piedra.
posdata:volveré con gana de dar guerra, jejejejejejje